Para mejores resultados siga los siguientes pasos:
  1. Seleccione el video que desea ver.
  2. Presione pausa.
  3. Espere que el video cargue completamente (cuando la linea roja llegue a su final)
  4. Presione Play nuevamente.
  5. Disfruta de el video sin ninguna pausa.

Archivos de Aclarando Conceptos (Click en la Fecha para desplegar los Programas)

Racismo

Jueves 8 deJunio de 2006.-

En un programa anterior de ACLARANDO CONCEPTOS, hablamos del racismo en los Estados Unidos; pero el racismo también existió y existe en América Latina. El concepto de clases dominantes y pueblo sometido, se hacía básicamente de acuerdo al concepto racial. Si en la escala superior se encontraba el español de la península, también éste ya venía con “superioridad” de acuerdo a su “blancura” o “pureza de raza”. El español “puro” no se mezclaba, a no ser por una aventura en tiempo de la emancipación de los esclavos o violación en tiempo de la esclavitud, con mujeres de “razas inferiores”. Los descendientes inesperados no eran por supuesto reconocidos y seguían el estatus de la madre, aunque a veces se sentían “superiores” a la madre (aunque inferiores al padre) por el matiz de su piel.Para ser almirante, dirigente, encomendador, oidor, capitán general, etc y cuanto título de nobleza o poder superior se podía usufructuar, se debía disponer de un título de “pureza” de sangre española. Siendo el pueblo español tremendamente mezclado: íberos, celtas, suevos, vándalos, alanos, visigodos, cartagineses, galos, francos, romanos, árabes y judíos, etc. La “pureza de raza” era una fantasía pero se exigía en España, para detentar puestos de poder en las nuevas colonias y básicamente era la forma de demostrar no tener sangre infiel (llamase judía o musulmana)en las venas, por el temor que éstos tomaran nuevamente el poder.Había una tremenda desconfianza en los judíos y musulmanes, que a pesar del armisticio de Granada que los reyes católicos, la nobleza y el clero, juraron respetar y que luego expulsaron de España a no ser una conversión forzosa al cristianismo; castellanizar sus apellidos; cambiar sus costumbres paganas, no bañarse tan seguido, y el desuso del idioma árabe ; muchos lo hicieron y vinieron al nuevo mundo, donde las presiones inquisidoras eran menos pronunciadas.Sin embargo, no podrían optar a cargos públicos de importancia, a no ser que enseñaran un certificado de “pureza de raza”, el cual se podía conseguir en España, si se disponía de la información real o del dinero suficiente para comprarlo. Los judíos y árabes musulmanes conversos, de zonas reconquistadas anteriormente, podían obtenerlo y así vemos como Alvarado, Dávila e incluso Colón, llegaron a disponer en la Colonia de poder.Sin embargo, la gran mayoría se dedicó a hacer trabajos técnicos, que los nativos y los africanos no podían hacer, y que al español “monárquico”, no le gustaba realizar. Ejemplo: Alfarería, talabartería, artesanía, construcción; herrería, comercio, etc. Se estableció así una corriente doble de españoles: el español “puro” con carta de pureza “real o falsificada” que detentaba el poder: militar, político, religioso y económico” que no se mezclaría (al menos no oficialmente, porque sus hijos perderían sus privilegios) y el español del pueblo, que se mezcló y formó parte de esa estructura artesanal, de trabajo manual, incluido el comercio, que el monárquico miraba con desprecio.De allí que el mestizaje latinoamerIcano y por ende, el de nuestro país, está inmerso básicamente el elemento árabe y judío español. Naturalmente los árabes en la España medioeval, después de 781 años de permanencia en España, traían a su vez toda la mezcla pródiga de las otras razas existentes en España.Por eso, el brillante escritor salvadoreño Alvaro Menéndez Leal, en una entrevista afirmó.Pregunta: ¿nunca le ha gustado escribir sobre lo salvadoreño?Respuesta: ¿por qué voy a escribir sobre indios en El Salvador, si no existen todos tenemos sangre mezclada: árabe, griega, española, india.A finales del siglo XVI después de 100 años de coloniaje, las razas ya habían sido estratificadas. El elemento racial de árabes y judíos, conversos al cristianismo, había sido ya absorbido en América y España. Los que no se quisieron convertir, tuvieron que huir a países musulmanes.Y la unificación española a través de catolicismo como religión única había sido oficializado.De esa forma, en la cúspide de la pirámide racial se encontraban los españoles, que habían nacido en España, sin la diferencia especifica original entre puros y conversos, aunque sí indirecta, a través de las influencias económicas y políticas heredadas.El siguiente nivel, eran los blancos hijos de españoles, pero nacidos en América llamados criollos. La independencia fue así básicamente la lucha de los criollos por destronar a los peninsulares, y tomar así su liderazgo.El tercer elemento lo constituían las mezclas de indios, blancos y negros y sus respectivos descendientes. Aunque ahora se utilizan solo los nombres de mestizo, mulato y zambo; antes la clasificación era más extensa, a saber
Hijo de español e india: MESTIZO.
De española y mestizo: CASTIZO
De español y negra: MULATO
De español y mulata: MORISCO
De español y morisca: CHINO o ALBINO
De español y albina: SALTA PA´TRAS
De indio y salta pa´tras: LOBO.
De lobo y china: JÍBARO
De lobo e india: ZAMBAIGO
De zambaigo e india: CAMBUJO
De zambaigo y loba: CALPAMULATO
De cambujo y mulato: ALBARAZADO
De calpamulato y cambuja: TENTE EN EL AIRE
De tente en el aire y mulata: NO TE ENTIENDO
De albarazado y mestiza: BARNOCINO
De barnocino y mulata: COYOTE
De no te entiendo e india: TORNA ATRÁS
De indio y mestiza: COYOTE
De coyote e india: CHAMIZO
De chamizo y mestiza: AHÍ TE ESTÁS
De negro con india: JARACHO
De indio con negra: ZAMBO
De negro con zamba: ZAMBO PRIETO, etc.
Tremenda estupidez. ¡Pero ésa es la historia!