Malas Negociaciones del Gobierno
Viernes 16 de junio de 2006.-
El aumento de las tarifas eléctricas era de esperarse, producto de la mala negociación con los entes privados y Leyes onerosas auto-impuestas.Naturalmente la empresa privada no es una organización humanitaria y no se establece para hacer obras sociales, sino que para ganar dinero. Fuera de ello, ganará lo más que pueda, si se le permite. Es el Estado Salvadoreño, a través de su Gobierno representativo, el que debe regular esta situación.Lamentablemente debido a mala capacidad de negociación histórica, el Gobierno salvadoreño siempre da más de lo que recibe, y carga con la diferencia, hasta que financieramente ya no puede y traslada el aumento al pueblo. Esto ha sido, el procedimiento repetitivo histórico, que talvez pudo servir al cantante para interpretar su famosa canción: “Tropecé de nuevo con la misma piedra”.Veamos el caso de la Electricidad.Con la privatización del Sistema de Distribución de la Energía y la generación térmica, la CEL dejó de controlar el sistema, la estrategia energética de nuestro país quedo eliminada y la CEL se volvió un Generador más.Desde el inicio la negociación fue totalmente onerosa para el estado salvadoreño.Al Generador Térmico Nejapa Power se le permitió fijar los precios de venta de su energía térmica – que incluso resultaba mayor que el precio vendido a los usuarios o a las compras internacionales, con un agravante adicional; se le debería comprar toda la energía producida y ofrecida al sistema, al precio auto-fijado por la compañía, aunque esta energía no fuera necesitada. La CEL erogó cantidades enormes de dinero por energía cara e incluso no necesitada, hasta que dispuso resciliar el contrato.Esto motivó una demanda ante Organismos Internacionales por US$140 millones de dólares, que el Gobierno perdió y que tuvo que pagar. Recientemente, los socios locales reclamaron su parte correspondiente a estas ganancias extraordinarias que aseguraban NO HABER recibido y me pregunto ¿si el Gobierno salvadoreño al menos recibió el 25% de la renta que correspondían a estas ganancias? O ¿si se quedó sin el plato y sin la cena?(Es oportuno recordar que Alvíz esta incoando, una acción similar por US$110 millones de dólares contra el país, lucro cesante al no permitirle usufructuar su contrato de las revisiones vehiculares). ¿Qué pasará? La respuesta en el próximo futuro.Habiendo nuevos Generadores en el sistema, se estableció luego un proceso donde a todos los Generadores se les compraría energía, al precio fijado por el más caro de todos. Otra pésima negociación.Recientemente sin embargo, se aprobó un sistema teóricamente menos oneroso, donde no se considerarían los precios más altos.Esto en la práctica puede fácilmente obviarse, con un Acuerdo prefijado, donde algunos operadores pueden ofrecer precios desproporcionadamente altos, a fin de servir de eliminación en el precio fijado y dejar así, la opción a un precio menor, pero siempre elevado previamente acordado. Esto es así factible porque a todos los operadores se les compra su energía, diferente a las otras licitaciones, donde los ofertantes compiten a ganar, o quedar fuera.En lugar de establecer un Sistema de Libre Competencia, donde el Gobierno podría comprar energía a precios mucho menores, en el 2003, el Gobierno salvadoreño se auto impuso un nuevo control, establecido por Decreto Ejecutivo; el Fondo de Compensación, donde las tarifas serían fijadas siempre por los operadores; pero si por cualquier circunstancia, (Decreto Legislativo; Conveniencia Política, Periodo Electoral, etc) no se aplicara este precio y se cobrara menos al consumidor, el Gobierno salvadoreño pagaría la diferencia a través de ese Fondo de Compensación; donde pierde el Gobierno o pierden los consumidores o ambos, pero nunca los Operadores. Para éstos últimos, se estableció el Sistema Jalisco…¡Ya que Jalisco nunca pierde!...De esa forma, la energía subió desde diciembre/2005, y no se trasladó al usuario por ser periodo Electoral, pero el Gobierno se hizo cargo de la diferencia a través del Fondo de Compensación, teniendo una deuda de US$34.9 millones de dólares, que se hubieran incrementado si los Diputados hubieran aprobado el Decreto de Congelación. Recientemente, a pesar de que la estación lluviosa ha empezado copiosa y la generación hidroeléctrica aumentará considerablemente (ya que incluso CEL ha empezado a desaguar sus embalses), el precio de la energía subió tanto que se le gravó al pueblo con un aumento del 14% e incluso el Gobierno tuvo que subsidiar, para que el aumento no fuera mayor, aumentando su deuda en el Fondo de Compensación, en lugar de reducirla.No hay dinero para congelar la tarifa, ni tampoco valor para cambiar la Ley auto-impuesta, ni capacidad de negociación para que los Operadores se conformen con ganancias razonables. Ellos determinan lo que desean ganar y el Gobierno adquiere un déficit y luego trata de trasladarlo a los consumidores total o parcialmente. Y aún así se endeuda más y el aumento tarifario sólo sirve, para no endeudarse mucho más todavía.Si se negociara en una compra consecuente, la energía bajaría considerablemente, pero para eso hay que reformar la Ley.¿Hay acaso voluntad política para hacerlo?¿O seguiremos subsidiando a las Generadores y distribuidores a través del aumento de tarifas y el Fondo de Compensación?