Planta eléctrica a base a carbón

Miércoles, 18 de Julio de 2007

Planta Eléctrica a Base de Carbón.

Actualmente existe en el Mundo una tendencia creciente a hablar del cambio climático y a promover la forma de encontrar una vía para un futuro de bajo contenido de carbono. Existe así una conciencia ecológica incrementada, en gran parte motivada por el temor a las condiciones climáticas adversas: calentamiento global, derretimiento de los casquetes polares; subida del nivel de los océanos y por consiguiente inundaciones e hundimientos y en ciertas zonas, desertificación galopante y pérdidas de cultivos. (Como es el caso actual en julio 2007 con la pérdida de más del 10% de la siembra del maíz en nuestro país).

Mientras los países se adaptan al cambio climático, en nuestro país se hace exactamente lo contrario.

Los países ricos, con excedentes de capital, pueden adaptarse al cambio climático, invirtiendo en obras de infraestructura para adecuarse a sus efectos aterradores. Por ejemplo, la ciudad de Londres está invirtiendo 350 millones de dólares en sistemas de refrigeración para el Metro. Holanda está invirtiendo alrededor de 3000 millones de dólares en la construcción de nuevos diques para protegerse de las inundaciones pronosticadas etc., etc.

Los países subdesarrollados como el nuestro, sin dinero para grandes proyectos conservacionistas; al menos deberíamos tratar de reducir la contaminación local, eliminando o no permitiendo proyectos ecológicamente destructivos. No podemos permitir así procesos altamente contaminantes, de mayor impacto ecológico que el beneficio recibido, como la incineración de llantas; planta eléctrica a base de carbón y la minería metálica química.

…El primero, un proceso autorizado, debería revertirse. Los otros 2, no deberían autorizarse…

Ya hemos hablado en otros programas de Aclarando Conceptos, de la minería química y la incineración de llantas. Nos corresponde ahora hablar del otro proyecto mencionado: la planta eléctrica a base de carbón.

Si bien todas las plantas de combustibles fósiles son contaminantes; el carbón las supera con creces a todas y no sólo por los gases de combustión que se generan, o por el carbón en suspensión, o los desechos orgánicos o por las cenizas; sino que incluso, por una dosis de radioactividad que se desprende de la quema de carbón; hasta el punto que se afirma, que existe mayor desprendimiento radioactivo de las plantas de energía a base de carbón, que en las centrales nucleares operando normalmente.

…A pesar de la escasez y encarecimiento del petróleo y sus derivados (Bunker en especial) y del gas natural, los precios del carbón se mantienen inalterados y con una suave tendencia a la baja; y por unidad de energía producida, están actualmente a 4 veces menos que los anteriores. ¿A qué se debe esto? La respuesta es sencilla: su gran contaminación…

Los precios de la energía producida son tremendamente bajos, muchísimo más baratos, que la obtenido por otras plantas térmicas. Pero dado la forma de negociación y de fijación del pliego tarifario históricos, no creemos que los precios bajen sensiblemente, ya que estos dependen de la participación humana. Lo que se mantendrá inexorablemente alta es la gran contaminación que generará. Esto no depende de nuestra participación. Es un proceso físico-químico ineludible.

Fuera de ello, y siendo la Empresa que promociona este proyecto, la dueña de 4 de las 5 distribuidoras de energía eléctrica; el proceso será integrado: desde la generación, la trasmisión y la distribución, incluyendo el uso de la red, el servicio al cliente y el cobro de su factura, los cuales también se incrementarán. ¿O esperaríamos un cambio en la habilidad de nuestro Gobierno para negociar?

No dudamos que el país necesita de nuevas inversiones para su futuro energético, pero 2 fuentes deberían definitivamente prohibirse: la energía nuclear y la energía del carbón.

Dada su alta contaminación, un proyecto tecnológicamente viable de “licuar” el carbón, haciéndolo gasolina sintética, para utilizarlo en automotores, el Syncrud, fracasó en los Estados Unidos. A finales de la década de los 70 y principios de la 80, EE.UU. creó un organismo federal de 300 funcionarios, la SYNTHETIC FUELS CORP, asegurando $25 mil millones, con un fondo adicional de $48 mil millones, cuando se terminarán los fondos anteriormente mencionados. El proyecto era financiera y tecnológicamente viable ¿Por qué fracasó? La respuesta es simple: Por la alta contaminación del carbón.

Si bien el carbón se utiliza en una tercera parte de la producción de energía eléctrica en el Mundo, esto se debe a su bajo precio y a que existen yacimientos importantes en determinados países, que necesitan utilizarse, como China, Estados Unidos, Canadá, Australia, Colombia, Indonesia, etc., que a su vez son países con enormes territorios, donde las plantas eléctricas se construyen lejos de los centro urbanos. En nuestro País no disponemos ni de carbón ni de territorio extenso; además de acuerdo a las negociaciones históricas, las ganancias extras le quedan a las empresas y al Estado le queda la contaminación… Activo para otros y Pasivo para nosotros… Al igual que las llantas, todo el material será importado y como la minería metálica, que los pozos de exploración están en los jardines de las casas; la planta se establecerá cercana a la ciudad (si se hace más lejos, se acercaría a otra población o caería al mar).

El reto de nuestro país es tremendo, pero no podemos estarle apostando únicamente a la economía, descuidando la Ecología. Ni Ecología absoluta, ni economía destructiva.

Somos el País más deforestado y contaminado de América Latina, y las voces ecológicas han sido siempre minimizadas en aras del “progreso”. Nosotros comprendemos que el progreso no puede detenerse y que no podemos volver al pasado, suprimiendo la ciencia, el desarrollo y la técnica; pero también debemos buscar el equilibrio con la Naturaleza, buscando el mayor progreso con el mínimo daño al medio ambiente. Eso significa que el progreso económico por un lado y el beneficio ecológico por el otro tienen que ir de la mano.