Viernes, 12 de enero de 2007
Recursos Naturales.
Nuestro país no carece de recursos naturales. Carecemos sí, del mínimo análisis de considerar que tenemos recursos naturales, que aunque relativamente escasos, son suficientes para realizar una política complementaria de desarrollo nacional.
…Todavía no tenemos un inventario nacional de recursos. Las preguntas ¿Qué? ¿Cuáles? ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Cuánto? ¿Por qué? Son permanentes interrogantes sin respuesta…
El problema se complica porque existe una política gubernamental de negociar y realizar tratados comerciales con los grandes del mundo, entrando a las ligas mayores a competir, sin estar debidamente preparados.
No se le dio importancia – al TLC que ofreció el Presidente Uribe de Colombia en su visita a El Salvador, aduciendo que el TLC prioritario era con los EUA la nación más poderosa y tecnificada del Mundo y que luego vendrían los TLC con la Comunidad Europea y luego con Taiwán y Japón. Sólo con súper pesados del planeta.
Dichos tratados no son malos en sí, si se prepara nuestro país para poder aprovecharlos en forma integral.
Son malos únicamente si deseamos entrar a competir en ligas mayores y estamos tan solo preparados para una liga juvenil.
Fuera de eso, cada país negocia de acuerdo a su conveniencia. No podemos así echarle la culpa a otros de nuestros males, cuando los culpables de nuestros males somos siempre nosotros mismos.
Como bien se dice, no es malo el que te perjudica; si no que es tonto el que se deja.
No se necesita ser un país poderoso tanto militar, ni financieramente. Tenemos únicamente que saber negociar, y discutir y solicitar y pedir y regatear, hasta usar el por favor; e incluso, el mañana; pero tenemos que tener la inteligencia suficiente y el conocimiento científico y tecnológico necesario.
El acontecer histórico del comercio oneroso del cambio de oro por espejitos y vidrios coloreados no es cosa del pasado. Se repite continuamente, aunque no, con los mismos materiales.
Y no necesariamente con sobornos, sino que muchas veces con enganches. La diferencia consiste en que en el soborno, la comisión que recibe el funcionario es sustancial con el aprovechamiento oneroso y el enganche, es que el funcionario no se da cuenta de la operación y recibe una dádiva despreciable o no recibe nada.
Ambos casos son despreciables.
Ahora bien, mézclese corrupción + incapacidad y se tendrá una mezcla explosiva. Y ese binomio es más común, de los que la mayoría se imagina.
Pondré algunos ejemplos históricos para no ofender a algunos funcionarios de turno.
Hace tiempo un Ministro de Agricultura recibió dádivas por comprar millones de arbolitos sin licitación para reforestar el país. Esta corrupción negativa se unió a la notoria incapacidad, de comprar árboles para clima frío, que no pudieron adaptarse a la mayor parte de clima cálido de nuestro país y tan sólo quedaron algunos, como unos pinos que se adaptaron a la zona fresca del Cristo Negro en el camino al Puerto de la Libertad. El país perdió dinero y también la oportunidad de reforestarse.
En ese mismo tiempo, un contador – vista, de una Institución Gubernamental cambió la procedencia de un maíz sudafricano (en el tiempo del Apartheid), cuya comercialización estaba prohibida por estar contaminado con mercurio, venenoso para toda forma de vida animal.
Cuando se han comprado granos duros, incluso con almidón modificado, se tiene por lo menos la posibilidad de abusar de la capacidad digestiva de los salvadoreños, “los comelotodo” como se nos llama o incluso trasladarlo a concentrado para uso animal.
Pero ¿mercurio? Según los rumores de esa época fueron botados en altamar, uniéndonos al mundo desarrollado, al menos en eso, de ser contaminantes en gran escala.
¿Y la leche radioactiva de Chernoby?
¿Y la carne enlatada donada? Con la explosión radioactiva en la URSS, subió a la atmósfera, bajo en lluvia, contaminó los pastos y el ganado europeo, contaminó radioactivamente la leche y la carne, éstas fueron asimismo contaminadas y naturalmente fueron procesados y vendidas o donadas al tercer mundo.
El proceso de donación o venta al menos de la lecha en polvo, pasó por un calvario marítimo de países que rechazaron la leche, por toda la costa del Atlántico de Sur América, el Caribe y Centro América. Se rumora que se quedó finalmente en el único país de Centro América sin salida al Atlántico.
En el VII Copimera celebrado en Chile en 1977, indicábamos que del Guano – estiércol de aves marinas – peruano y chileno, vendido como abono a bajo precio, era utilizado por las naciones industrializadas para obtener uranio.
Había un total desconocimiento de la situación, aunque se nos dijo que ellos suponían que del cobre chileno obtenían oro no detectado.
Y hablando de las minas recientes en nuestro país ¿Ya se sabe que otros minerales más valiosos que el oro y la plata todavía, se encuentran en ellas?
…Los consejos internacionales son a veces bombas “caza-bobos”, las donaciones recibidas son a veces productos vencidos o nocivos o peligrosos; las recomendaciones son a veces obstáculos para nuestro desarrollo.
Con esta vorágine de negatividades, ya se hizo necesaria una clasificación de cuarto y quinto mundo para las naciones más atrasadas del planeta.
¿Qué somos? ¿Un país en vías de desarrollo; un país subdesarrollado o un país en vías de retroceso?...
…Todavía no tenemos un inventario nacional de recursos. Las preguntas ¿Qué? ¿Cuáles? ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Cuánto? ¿Por qué? Son permanentes interrogantes sin respuesta…
El problema se complica porque existe una política gubernamental de negociar y realizar tratados comerciales con los grandes del mundo, entrando a las ligas mayores a competir, sin estar debidamente preparados.
No se le dio importancia – al TLC que ofreció el Presidente Uribe de Colombia en su visita a El Salvador, aduciendo que el TLC prioritario era con los EUA la nación más poderosa y tecnificada del Mundo y que luego vendrían los TLC con la Comunidad Europea y luego con Taiwán y Japón. Sólo con súper pesados del planeta.
Dichos tratados no son malos en sí, si se prepara nuestro país para poder aprovecharlos en forma integral.
Son malos únicamente si deseamos entrar a competir en ligas mayores y estamos tan solo preparados para una liga juvenil.
Fuera de eso, cada país negocia de acuerdo a su conveniencia. No podemos así echarle la culpa a otros de nuestros males, cuando los culpables de nuestros males somos siempre nosotros mismos.
Como bien se dice, no es malo el que te perjudica; si no que es tonto el que se deja.
No se necesita ser un país poderoso tanto militar, ni financieramente. Tenemos únicamente que saber negociar, y discutir y solicitar y pedir y regatear, hasta usar el por favor; e incluso, el mañana; pero tenemos que tener la inteligencia suficiente y el conocimiento científico y tecnológico necesario.
El acontecer histórico del comercio oneroso del cambio de oro por espejitos y vidrios coloreados no es cosa del pasado. Se repite continuamente, aunque no, con los mismos materiales.
Y no necesariamente con sobornos, sino que muchas veces con enganches. La diferencia consiste en que en el soborno, la comisión que recibe el funcionario es sustancial con el aprovechamiento oneroso y el enganche, es que el funcionario no se da cuenta de la operación y recibe una dádiva despreciable o no recibe nada.
Ambos casos son despreciables.
Ahora bien, mézclese corrupción + incapacidad y se tendrá una mezcla explosiva. Y ese binomio es más común, de los que la mayoría se imagina.
Pondré algunos ejemplos históricos para no ofender a algunos funcionarios de turno.
Hace tiempo un Ministro de Agricultura recibió dádivas por comprar millones de arbolitos sin licitación para reforestar el país. Esta corrupción negativa se unió a la notoria incapacidad, de comprar árboles para clima frío, que no pudieron adaptarse a la mayor parte de clima cálido de nuestro país y tan sólo quedaron algunos, como unos pinos que se adaptaron a la zona fresca del Cristo Negro en el camino al Puerto de la Libertad. El país perdió dinero y también la oportunidad de reforestarse.
En ese mismo tiempo, un contador – vista, de una Institución Gubernamental cambió la procedencia de un maíz sudafricano (en el tiempo del Apartheid), cuya comercialización estaba prohibida por estar contaminado con mercurio, venenoso para toda forma de vida animal.
Cuando se han comprado granos duros, incluso con almidón modificado, se tiene por lo menos la posibilidad de abusar de la capacidad digestiva de los salvadoreños, “los comelotodo” como se nos llama o incluso trasladarlo a concentrado para uso animal.
Pero ¿mercurio? Según los rumores de esa época fueron botados en altamar, uniéndonos al mundo desarrollado, al menos en eso, de ser contaminantes en gran escala.
¿Y la leche radioactiva de Chernoby?
¿Y la carne enlatada donada? Con la explosión radioactiva en la URSS, subió a la atmósfera, bajo en lluvia, contaminó los pastos y el ganado europeo, contaminó radioactivamente la leche y la carne, éstas fueron asimismo contaminadas y naturalmente fueron procesados y vendidas o donadas al tercer mundo.
El proceso de donación o venta al menos de la lecha en polvo, pasó por un calvario marítimo de países que rechazaron la leche, por toda la costa del Atlántico de Sur América, el Caribe y Centro América. Se rumora que se quedó finalmente en el único país de Centro América sin salida al Atlántico.
En el VII Copimera celebrado en Chile en 1977, indicábamos que del Guano – estiércol de aves marinas – peruano y chileno, vendido como abono a bajo precio, era utilizado por las naciones industrializadas para obtener uranio.
Había un total desconocimiento de la situación, aunque se nos dijo que ellos suponían que del cobre chileno obtenían oro no detectado.
Y hablando de las minas recientes en nuestro país ¿Ya se sabe que otros minerales más valiosos que el oro y la plata todavía, se encuentran en ellas?
…Los consejos internacionales son a veces bombas “caza-bobos”, las donaciones recibidas son a veces productos vencidos o nocivos o peligrosos; las recomendaciones son a veces obstáculos para nuestro desarrollo.
Con esta vorágine de negatividades, ya se hizo necesaria una clasificación de cuarto y quinto mundo para las naciones más atrasadas del planeta.
¿Qué somos? ¿Un país en vías de desarrollo; un país subdesarrollado o un país en vías de retroceso?...