El Combustible y sus derivados III
Jueves 25 de Enero de 2007.-
En nuestro País existen 5 grupos distribuidores de Combustible: Los 3 tradicionales: ESSO, SHELL, TEXACO y además, PUMA y los de bandera blanca. Los 2 primeros, manejan la refinería (Rasa) y por consiguiente importan Petróleo reconstruido y al decir de ellos, también Petróleo crudo; TEXACO es importador neto de derivados y entre PUMA y bandera blanca, manejan un poco más de 100 estaciones de expendio al detalle. Las de bandera blanca, que se promocionaron como independientes para generar competencia no lo son, ya que PUMA les suministra el combustible, ya sea directa o a través de mayoristas, y dependen del precio que éste les fija.
De esa forma son 4 los consorcios involucrados, y por consiguiente no constituyen un Monopolio (de Mono: 1); aunque bien pueden constituir un Oligopolio (de Oligos: poco).
Alguien puede decir sin embargo que en nuestro país existe competencia, lo cual es cierto solamente a nivel de los expendedores detallistas, que son los explotados en la línea de comercialización y que incluso tienen que competir con los grandes importadores, que tienen sus propias expendedoras. El costo de galón varía así en unos pocos centavos, cuando el expendedor detallista, considera la afluencia de clientes y la zona residencial. El Ministerio de Economía nunca ha supervisada precio alguno; sólo se ha encargado de promocionar las estaciones de servicio con centavos más baratos. Competencia aparente y simbólica a cargo de los pequeños contribuyentes o expendedores al detalle.
Ahora bien, ¿Qué pasa con los 3 grandes y el mediano? 3 ½ ó 4 no hacen necesariamente un oligopolio. Se requieren conversaciones internas; acuerdos entre las partes, política unitaria; comercialización exacta; que dan lugar a una serie de señales que hacen evidente este Oligopolio.
Veamos algunas:
1. El precio de mercado ofrecido por las 4 compañías es el mismo o prácticamente el mismo, sin variación alguna o sin variación significativa. Siendo de diferentes estructuras; diferentes costos; diferentes orígenes; unos fabrican y otros importan, etc., tienen que existir diferencias.
Las matemáticas son fáciles de tabular. Llegar a un precio de venta prácticamente igual es una coincidencia de 1 en 1 millón y por una vez. Si se repite permanentemente, la casualidad sería casi 0.
2. En el 2005, en nuestro País, todos declararon pérdidas operativas de millones. Que casualidad que a las 4 les pasó lo mismo y con los precios más altos de la historia. Es de aclarar que en el 2005 las mismas petroleras declararon en Estados Unidos y Europa las ganancias más altas de la historia de la humanidad, no sólo en el rubro de petróleo, sino que en todos los rubros de la economía. En el 2006 todavía no declarado, lo más seguro es que declaren nuevamente pérdidas, esto es cero impuesto de renta y devolución total del pago a cuenta.
Aquí no es un abuso de las petroleras, sino un descuido de los Ministerios de Economía y Hacienda de nuestro País. Bien dice el refrán que “en Arca abierta hasta el justo peca”.
En una ONG su función social es hacer beneficencia. La función de una Empresa privada es producir y ganar dinero.
Le corresponde al Gobierno vigilar, regular y cobrar sus impuestos.
3. Los representantes de las petroleras siempre salen hablando en nombre de las 4, defendiendo sus políticas, justificando los precios; anunciando las pérdidas, etc. Si fuera realmente competencia, no sólo veríamos precios diferentes y declaraciones distintas, sino que participaciones independientes o incluso a veces antagónicas. Ejemplo: Coca Cola y Pepsi Cola.
4. La forma de fijar los precios es exactamente la misma en todas, utilizando el Crudo de referencia West Texas Intermediate (WTI) que es el más caro del mundo (antes usaban el Brent del Mar del Norte, que era el más caro en ese entonces); cuando no lo compran en ninguno de esos lugares.
A la hora de fijar los precios, tanto las compañías petroleras como el Gobierno, toman como precio base el monto de barril de petróleo fechado en el día de carga del tanquero, más los 2 días anteriores y los 2 días posteriores a éste y de allí se hace un promedio con esos 5 días, siempre con el WTI como crudo de referencia. Fuera de un crudo de referencia inadecuado, las bajas en el precio se trasladan al mercado nacional muy lentamente y en menor proporción. Las alzas si son prácticamente automáticas; como puede verse con mayor celeridad en los últimos meses.
5. Comprar derivados de Venezuela o México de Ecuador o Chile, abarataría los costos y no necesariamente porque esos Países nos darían precio preferencial, si no porque aún vendiéndonos a precio normal, los precios son sustancialmente menores. Es de aclarar que las petroleras no compran petróleo ni derivados de Estados Unidos (sino latinoamericanos, siempre más baratos). E incluso podemos utilizar financiamiento a intereses prácticamente nulos.
…Hay que aprender a negociar; y además, pedirle a los Ministerios de Economía y Hacienda de nuestro País, que busquen asesoría…
Con el TLC con Estados Unidos ya pusimos a nuestro País a jugar en ligas mayores. Pero con el petróleo y derivados, al igual que en 1970 y 1982 con el fútbol, ya estuvimos y estamos en ligas mayores. Tenemos que prepararnos más, para jugar con eficiencia. En deportes se dice que el mérito no es ganar sino competir; pero en la macroeconomía no se juega un partido deportivo; sino que está en juego nuestra propia supervivencia.
De esa forma son 4 los consorcios involucrados, y por consiguiente no constituyen un Monopolio (de Mono: 1); aunque bien pueden constituir un Oligopolio (de Oligos: poco).
Alguien puede decir sin embargo que en nuestro país existe competencia, lo cual es cierto solamente a nivel de los expendedores detallistas, que son los explotados en la línea de comercialización y que incluso tienen que competir con los grandes importadores, que tienen sus propias expendedoras. El costo de galón varía así en unos pocos centavos, cuando el expendedor detallista, considera la afluencia de clientes y la zona residencial. El Ministerio de Economía nunca ha supervisada precio alguno; sólo se ha encargado de promocionar las estaciones de servicio con centavos más baratos. Competencia aparente y simbólica a cargo de los pequeños contribuyentes o expendedores al detalle.
Ahora bien, ¿Qué pasa con los 3 grandes y el mediano? 3 ½ ó 4 no hacen necesariamente un oligopolio. Se requieren conversaciones internas; acuerdos entre las partes, política unitaria; comercialización exacta; que dan lugar a una serie de señales que hacen evidente este Oligopolio.
Veamos algunas:
1. El precio de mercado ofrecido por las 4 compañías es el mismo o prácticamente el mismo, sin variación alguna o sin variación significativa. Siendo de diferentes estructuras; diferentes costos; diferentes orígenes; unos fabrican y otros importan, etc., tienen que existir diferencias.
Las matemáticas son fáciles de tabular. Llegar a un precio de venta prácticamente igual es una coincidencia de 1 en 1 millón y por una vez. Si se repite permanentemente, la casualidad sería casi 0.
2. En el 2005, en nuestro País, todos declararon pérdidas operativas de millones. Que casualidad que a las 4 les pasó lo mismo y con los precios más altos de la historia. Es de aclarar que en el 2005 las mismas petroleras declararon en Estados Unidos y Europa las ganancias más altas de la historia de la humanidad, no sólo en el rubro de petróleo, sino que en todos los rubros de la economía. En el 2006 todavía no declarado, lo más seguro es que declaren nuevamente pérdidas, esto es cero impuesto de renta y devolución total del pago a cuenta.
Aquí no es un abuso de las petroleras, sino un descuido de los Ministerios de Economía y Hacienda de nuestro País. Bien dice el refrán que “en Arca abierta hasta el justo peca”.
En una ONG su función social es hacer beneficencia. La función de una Empresa privada es producir y ganar dinero.
Le corresponde al Gobierno vigilar, regular y cobrar sus impuestos.
3. Los representantes de las petroleras siempre salen hablando en nombre de las 4, defendiendo sus políticas, justificando los precios; anunciando las pérdidas, etc. Si fuera realmente competencia, no sólo veríamos precios diferentes y declaraciones distintas, sino que participaciones independientes o incluso a veces antagónicas. Ejemplo: Coca Cola y Pepsi Cola.
4. La forma de fijar los precios es exactamente la misma en todas, utilizando el Crudo de referencia West Texas Intermediate (WTI) que es el más caro del mundo (antes usaban el Brent del Mar del Norte, que era el más caro en ese entonces); cuando no lo compran en ninguno de esos lugares.
A la hora de fijar los precios, tanto las compañías petroleras como el Gobierno, toman como precio base el monto de barril de petróleo fechado en el día de carga del tanquero, más los 2 días anteriores y los 2 días posteriores a éste y de allí se hace un promedio con esos 5 días, siempre con el WTI como crudo de referencia. Fuera de un crudo de referencia inadecuado, las bajas en el precio se trasladan al mercado nacional muy lentamente y en menor proporción. Las alzas si son prácticamente automáticas; como puede verse con mayor celeridad en los últimos meses.
5. Comprar derivados de Venezuela o México de Ecuador o Chile, abarataría los costos y no necesariamente porque esos Países nos darían precio preferencial, si no porque aún vendiéndonos a precio normal, los precios son sustancialmente menores. Es de aclarar que las petroleras no compran petróleo ni derivados de Estados Unidos (sino latinoamericanos, siempre más baratos). E incluso podemos utilizar financiamiento a intereses prácticamente nulos.
…Hay que aprender a negociar; y además, pedirle a los Ministerios de Economía y Hacienda de nuestro País, que busquen asesoría…
Con el TLC con Estados Unidos ya pusimos a nuestro País a jugar en ligas mayores. Pero con el petróleo y derivados, al igual que en 1970 y 1982 con el fútbol, ya estuvimos y estamos en ligas mayores. Tenemos que prepararnos más, para jugar con eficiencia. En deportes se dice que el mérito no es ganar sino competir; pero en la macroeconomía no se juega un partido deportivo; sino que está en juego nuestra propia supervivencia.