Mayor Economía, menor desarrollo social.
Lunes, 9 de abril de 2007.
Nuestro país ha subido en el ranking mundial económico; para bajar, incluso en mayor proporción en el desarrollo social. Para tratar de disminuir esta tendencia, necesitamos vivir una dimensión real de fraternidad o al menos de solidaridad.
Los salvadoreños somos por naturaleza individualistas y mantenemos el principio de “sálvese quien pueda”; pero la crisis mundial que se avecina, nos hará recapacitar y quizás cambiar, no tanto ¡como todos para uno y uno para todos!, pero al menos, ser un poco más solidarios.
Alguien dijo por allí, que los 7 años de las vacas flacas, están por terminar y que luego vendrán las 7 vacas gordas, (en señal de abundancia) como se vislumbra en el sueño del Faraón. Sin embargo, sin negar que las vacas que han pasado han sido flacas; podrían ser gordas, si se consideran a otras aún más flacas, que están por venir.
La época de la tribulación bíblica ya empezó y las copas han sido derramadas. Alguien puntualizó que la tribulación empezó con el Tsunami que azotó el Océano Indico y asoló varios países asiáticos. Otros están esperando ser arrebatados. Nosotros consideramos que lo que Dios hará con los creyentes es que los confortará y les dará refugio y fortaleza… Las raíces semíticas de arrebatar y confortar son tan parecidas, que pueden resultar iguales para un traductor no muy avezado en hebreo, árabe o arameo…
Si nos preparamos espiritual y materialmente, las tragedias serán absorbidas y sobrellevadas. Seremos así, confortados.
Cuatro son los Jinetes del Apocalipsis: La guerra, el hambre, la peste y la destrucción.
La peste, con sus enfermedades históricas, como las diarreas e infecciones respiratorias agudas; otras más recientes como el Dengue y el SIDA y otras próximas a venir como la gripe AVIAR y una serie de arbovirus ¿estamos preparados?
Si hay escasez de medicamentos e insumos y servicios hospitalarios; el agua escasea; los medios de subsistencia del pueblo son cada vez más escasos; si la gente se muere por enfermedades curables; ¿Qué pasará con las más difíciles? ¿o con las casi incurables?
Y la destrucción; la naturaleza incrementada, ya la tierra entro en su ciclo de inestabilidad cósmica agravada por las acciones negativas de los seres humanos: terremotos; inundaciones, huracanes, fuego, aire, agua y tierra combinados; más devastadores y de mayor intensidad, aunado a la débil respuesta de nuestro país a soportar los embates; y con viviendas construidas en zonas de riesgo, y con pseudos-viviendas construidas con materiales inapropiados por un pueblo que se conforma con ellos, porque peor es nada.
¡Que Dios nos proteja!...
Esto se agrava a su vez por 4 defectos capitales que todos tenemos que reducir o eliminar y que constituyen nuestros defectos más grandes.
a) Soberbia y sus variantes: Egoísmo; orgullo en exceso, sólo yo valgo; te apago la luz para que nadie te vea; te despido para que no me quites el puesto; lo mío, mío y lo tuyo, de los 2, etc.
b) Avaricia; codicia, no me toques el bolsillo, lo demás te lo aguanto. Si consigo dinero, que me importan los demás. Te robo, te estafo, te decomiso, te exploto, te engaño…
c) Envidia – la causa de todos los pecados.
d) Deslealtad y sus variantes: Cobardía, debilidad, desagradecimiento, olvido hasta de lo malo (hay que perdonar para no amargarse), pero nunca olvidar (para que no te lo hagan de nuevo)… y lo peor de todo, la traición y más grave aún: aplaudida y premiada, entre otras formas por el famoso “criterio de oportunidad”…
Fuera de ello, necesitamos eliminar los 4 “ismos” más negativos, que forman parte de nuestra idiosincrasia, o que al menos los aceptamos como verdad histórica y presente y no son más que estupideces.
A) Racismo – la condición de que hay razas superiores e inferiores.
B) Clasismo – que vale más el que tiene más. Poder y tener y sus variables poder tener y tener poder; en lugar del ser y su esencia.
C) El urbanismo – no confundir con urbanidad – que conlleva el desarrollo de las ciudades y las grandes urbes y el abandono progresivo del campo.
D) El machismo – donde el hombre tiene todos los derechos y la mujer todos los deberes y que es practicada y aceptada por el 78% de la población salvadoreña.
Fuera de ello existe otro ismo negativo pero no lo puntualizamos antes, porque en nuestro país no existe ni deberá existir, que es el fanatismo religioso.
Tenemos que ser creyentes y estar firmes en nuestra fe, pero tenemos que aceptar que otros piensen diferente.
Siendo un solo Dios, es por consiguiente el Dios de todo, de todos y de todas.
Somos así una sola familia que llamamos humana y deberíamos ser parte de una gran hermandad.