#09, Presas El Chaparral y Cimarron, Lancheros artesanales; Desmovilizados y Pensionados

Presas El Chaparral y Cimarron, Lancheros artesanales; Desmovilizados y Pensionados

Lunes 27 de Octubre 2008.

No hay duda de que se necesitan proyectos de energía renovable en el país. De allí que las presas de el Chaparral y el Cimarrón, merecen ser aplaudidas. Pero en estos momentos de reservas económicas casi a 0, endeudamientos casi topados y con una crisis mundial de grandes proporciones, es el momento de ser más acuciosos, a la hora de invertir y gastar. Considero que el monto de la inversión en esas presas, debe revisarse.

Un fundamento para toda negociación es el regateo; considerándose éste, en pagar menos, no en pagar más. Y en el estado económico en que nos encontramos y el que con toda seguridad, se deteriorará en el próximo futuro, existe una necesidad imperiosa de: mejorar nuestra capacidad negociadora, aumentar la eficiencia en el manejo del presupuesto; aplicar una política de austeridad y ahorro; aplicar y gastar no sólo lo necesario, sino que también, al menor precio posible.

No sólo hay que saber gastar, sino también, saber comprar.

Volvamos al Chaparral. El Diario de Hoy el 8 de Octubre de 2008, menciona del encarecimiento de El Chaparral, afirmando textualmente: “Por el alza del precio de los materiales la presa pasó de $140 millones a $163 millones, luego a $219.9 millones y con el costo de los terrenos, llegará a $239.9 millones”. Esto es: 99.9 millones de sobreprecio. 

Y continuaba diciendo: Según la CEL, aunque los terrenos se han venido adquiriendo poco a poco, desde hace unos 10 años, con fondos propios de la Institución, en su valor, por alguna razón, no se había incluido en el costo total de la inversión que se ha hecho pública. Y más adelante aclara: fue hasta el pasado viernes (3 de Octubre 2008) que la CEL indicó que el precio de los terrenos, no estaban dentro de los costos que se habían manejado públicamente.

Como quiera que sea: $239.9 millones genera un aumento de 99.9 millones. Esto es, prácticamente 100 millones de dólares; si los terrenos no se consideraran, serían $80 millones más, siempre una fortuna, para un país tan pequeño y endeudado como el nuestro. En ambos casos, una enorme y redonda cantidad. Según se informa por las autoridades de CEL, la Central elevó su costo, por el encarecimiento de los materiales y la maquinaria, inducido por el aumento del precio del petróleo y la devaluación del dólar ante el Euro. Pero como la Presa no ha sido construida y las condiciones anteriores han sido revertidas, es necesaria una nueva negociación que baje su costo.

Si no, las arcas de la CEL quedarán vacías (US $56 millones) y el crédito del Banco Centroamericano de Integración Económica, obtenido a interés alto, 163 millones al 6.5% anual, tendría que ser utilizado totalmente, con una carga de intereses solamente, de más de 10 millones de dólares anuales.

Fuera de eso, el proyecto es “llave en mano” y hay un impedimento jurídico, para ajustar precios en contratos de este tipo.

En efecto, según el artículo 62 del Reglamento de la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública, inciso 3 se estipula: “Para los contratos por la modalidad llave en mano, no podrá pactarse ajustes de precios”. Entendemos que la Licitación de la Presa “EL Chaparral” se hizo por la modalidad “llave en mano”. Pero aunque se pudiera, no se cumplió el procedimiento para hacerlo. En caso de ajustes permitidos (que éste no es el caso); se necesita individualizar los materiales y cuantificar cada uno de los sumandos, justificar cada uno de los aumentos, en una forma detallada y precisa y hacerlos públicos (Art. 88 de la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública, conocida como la LACAP). No es un sistema automático o simple, sino complicado y riguroso. 

En todo caso, siendo Astaldi una compañía que ha sido favorecida con varios proyectos estatales en nuestro país desde 1994, construyendo carreteras y actualmente trabajando en la construcción de la Unidad Médica de Ilopango y en la reconstrucción del Hospital de San Miguel y siendo las autoridades de CEL personas honorables, un nuevo ajuste de la obra – esta vez a la baja – por la disminución de precios de las materias primas y el fortalecimiento del dólar, debería ser realizado. El Euro actualmente se encuentra en el punto más bajo frente al dólar desde hace 2 años.

Todo el Mundo ha visto como el precio de petróleo se ha reducido; las “commodities” – materias primas “están a la baja y el $ ha recuperado terreno con el Euro. Hay una gran recesión mundial y todo sigue bajando…

Además, la compañía informa que está esperando el anticipo de US $41 millones, para empezar a comprar los materiales, esto es, que todavía no los ha comprado y de esa forma, los comprará más baratos. 

Además, toda Licitación tiene sus riesgos, y estos son cubiertos por el ofertante, no por el comprador; ya que si las ganancias no se comparten, no se tiene por qué compartir las pérdidas o compensar la disminución de las ganancias.

Además, no estamos para gastar en exceso, con arcas vacías y una crisis en cierres de enorme magnitud. 

Por otro lado y toda vez que el Cimarrón está en su fase de estudio y es una obra muchísimo más grande y de un endeudamiento mayor, es conveniente que la negocie la nueva Administración Pública. Nunca es conveniente los empréstitos de última hora de un presidente saliente, a no ser que sean de extrema urgencia. 

Además todo a la carrera, no sale bien.

Esperamos que no nos salgan en los próximos meses, con préstamos o anticipos millonarios para una Presa, que todavía está en su fase de estudio”. 

En otros casos totalmente diferentes, el Fondo de Conservación Vial (FOVIAL), continúa obteniendo recursos provenientes del sector pesquero, pese a que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) declaró inconstitucional en julio de 2005 el impuesto de $0.20 por cada galón de combustible que utilizan los cerca de 35,000 pescadores artesanales censados en el país. Al sector le han cobrado esa contribución ilegal desde hace ya 7 años. (3 años desde que fue declarada inconstitucional).

El jueves 12 de octubre de 2006, la Asamblea aprobó, con dispensa de trámite, la reforma al Artículo 26 de la Ley del FOVIAL, que eximiría a los pescadores de ese pago. Sin embargo, el Presidente de la República, devolvió en noviembre el Decreto con una serie de observaciones a la Asamblea “para evitar la evasión del Impuesto”.

Hasta la fecha, estas observaciones y esta reforma están engavetadas, por lo que los pescadores siguen pagando una tasa inconstitucional.

El Articulo 26 de la Ley del FOVIAL establece que deberán exceptuarse de la disposición de pago el transporte público de pasajeros y la gasolina de aviación. Este mismo fragmento fue cuestionado por la CSJ por “establecer una exclusión arbitraria de beneficio de las actividades de pesca en las excepciones contenidas en similares condiciones para la gasolina de avión”. Los lancheros artesanales siguen pagando el FOVIAL a pesar de que la Corte Suprema de Justicia, lo decretó anticonstitucional. Por un lado se despilfarra el dinero y por el otro, se busca la forma de aumentar los ingresos, siempre a expensas de los débiles; aunque sea de forma ilegal.

¿Hasta cuándo?

Por otro lado, los desmovilizados, combatientes de ambos bandos, se encuentran abandonados y los pensionados del sistema antiguo, con pensiones prácticamente congeladas y aún más que eso, devaluadas. Y el nuevo sistema, concentrado en fondos del Estado, en contra del Principio elemental que “no hay que poner todos los huevos en una sola canasta”, y el Gobierno, con arcas vacías.

Un colapso gubernamental y adiós Fondos de Pensiones, con un Superintendente de Pensiones que no da la cara y que prácticamente nadie conoce. Sobre éste último caso, realizaremos próximamente un programa específico de Aclarando Conceptos.