#08, Precios de la Gasolina y Tarifas Eléctricas

Precios de la Gasolina y Tarifas Eléctricas

Lunes 27 de Octubre 2008

1. Precios de las Gasolinas:

Confundiendo libertad con libertinaje, se les ha permitido a las petroleras abusar de los consumidores, con la total pasividad del Gobierno, aduciendo “libre” mercado, cuando evidentemente nunca ha sido libre, sino que “regulado” por las mismas petroleras.

Si se revisa el archivo de los programas de Aclarando Conceptos en el 2006 y 2007, se encontrará un sinnúmero de datos que confirman lo anterior; dañando permanentemente el bolsillo de los salvadoreños.

Para no ser repetitivos, mencionaremos el caso reciente.

Se ha establecido últimamente el Precio de Referencia para los combustibles, fijados por el Ministerio de Economía, a manera de ponderación, ya que no tiene carácter obligatorio y ni siquiera es un precio de concertación. Fuera de ello y como lo demostramos en un programa reciente de Aclarando Conceptos, el alza inicial de $0.40 galón, sólo en la primera semana, (ya que ésta se tabuló en US$1.08, repartida en 3 semanas), supuestamente provocada por el huracán Ike, que fue aceptada con avidez por todas las gasolineras, distorsionó el precio de referencia. En la zona del impacto, el galón subió únicamente $0.20 galón y en otras áreas de Estados Unidos, incluso bajó.

Un precio inicial distorsionado, que antes del Ike ya estaba incorrectamente más alto, debido al supuesto impacto del Huracán Gustav, impide tener un precio de referencia fiel reflejo de la Costa del Golfo en los Estados Unidos, que El Salvador insiste en mantener, a pesar de ser la zona más cara del mundo.

Estamos con los precios mundiales más bajos del petróleo de los últimos 13 meses, debido a la recesión y disminución de consumo y por consiguiente los precios de los derivados tienden a la baja. Si bien las bajas anunciadas últimamente han sido más reales que al inicio, todavía se necesita ajustarlas mejor. Como un ejemplo; el precio de referencia de la gasolina regular bajó $0.39 galón, el martes 14 de octubre, una baja de alivio, pero en la Costa del Golfo bajó $0.446, esto es 5.6 centavos menos por galón, quedando en $2.99 galón. 

El lunes 20 de octubre del 2008, la gasolina regular en la Costa del Golfo de los Estados Unidos se cotizaba a $2.734 y en Texas a $2.686 – prácticamente el mismo precio de hace un año y con tendencia a la baja. Aquí en nuestro país, las bajas tienen que ser más pronunciadas.

Fuera de ello, el precio de referencia se fija los lunes y en esta vez, se publicó el martes, permitiendo a las petroleras 1 día más de sobreprecio. (Dado los altos volúmenes, la diferencia diaria es de cientos de miles de dólares más). Por otro lado, la diferencia de precio de servicio completo con autoservicio ya no son 4 ó 5 centavos por galón. Ahora ya se encuentran diferencias de 0.10, 0.16 y hasta de $0.28 centavos, adaptándose a las diferencias existentes en los Estados Unidos. Sin embargo allá un trabajador gana en 1 hora más de lo que gana un trabajador acá durante todo el día.

Los rótulos de autoservicio se encuentran iluminados, grandes y visibles y los de servicio completo (precio mayor), escondidos, pequeños y oscuros. Por otro lado, no se revisa la calidad de las gasolinas ofrecidas, ni sus posibles contaminantes.

2. Tarifas Eléctricas

La historia de la negociación con las generadoras y distribuidoras eléctricas ha sido tan deficiente, similar que con las petroleras. Con la privatización del sistema de Distribución de la Energía y la generación térmica, la CEL dejó de controlar el sistema, la estrategia energética de nuestro país quedo eliminada y la CEL se volvió un Generador más.

Desde el inicio de la negociación fue totalmente onerosa para el Estado salvadoreño.

Al generador térmico inicial Nejapa Power se le permitió fijar los precios de venta de su energía térmica – que incluso resultaba mayor que el precio vendido a los usuarios o a las compras internacionales, con un agravante adicional; se le debería comprar toda la energía producida y ofrecida al sistema, al precio auto-fijado por la compañía, aunque esa energía no fuera necesitada. La CEL erogó cantidades enormes de dinero por energía cara e incluso no necesitada, hasta que dispuso resciliar el contrato.

Eso motivó una demanda internacional, que el gobierno no pudo defender y perdió US $140 millones de dólares.

Hace unos años, los socios locales reclamaron su parte correspondiente a estas ganancias extraordinarias que aseguraban NO HABER recibido y me pregunto: ¿Si el Gobierno salvadoreño al menos recibió el 25% de la renta que le correspondía por estas ganancias? ó ¿si se quedó sin el plato y sin la cena?

Al haber más “competidores” se les compró toda la energía a todos, a precios iguales, pero utilizando el más alto ofrecido por el operador más caro. Este sistema, con algunas variantes, continuó operando de esa manera.

A pesar de algunos cambios introducidos en el mecanismo de compra, el Estado sigue a merced de los operadores. En forma tímida sin embargo, el Gobierno en el 2003, estableció un sistema de fijar los precios, pero basado en un mecanismo llamado Fondo de compensación, donde el Gobierno pagaría la diferencia entre el precio fijado por él y el precio impuesto por las Empresas Eléctricas.

De esa forma, las Generadoras y Distribuidoras eléctricas reciben un subsidio, ya sea por aumento de tarifas o por el Fondo de Compensación.

El martes 14 de octubre de 2008 la Prensa Gráfica anunciaba:

“Distribuidoras anuncian alzas en las tarifas eléctricas”, con un aumento del 38% e incluso mayor para consumidores residenciales, aunque el Gobierno acordó prorrogar por15 días el plazo para el ajuste”. Y eso a pesar que el petróleo y el fuel oil han bajado substancialmente de precios y la energía hidroeléctrica está a su más alta capacidad. Las distribuidoras tomaron la decisión unilateral de modificar las tarifas y fijar su monto; ya que no había acuerdo con el Gobierno para el pago del subsidio adeudado de US $186 millones del semestre anterior.

El mismo día El Diario de Hoy comentó; “que el alza de tarifas eléctricas publicadas por las distribuidoras quedó sin efecto”, aseguró ayer tarde el Ministro de Economía. Claro está, el aumento se cobrará a través del subsidio gubernamental (mayor endeudamiento). Y más adelante agrega: las tarifas experimentarían incrementos mayores al 38% para el sector residencial; 23% para las industrias y el 52% para el alumbrado público. Todo autofijado por las compañías. Volvemos a lo mismo. El aumento ya está decretado; o lo paga el pueblo directamente o lo paga el Gobierno (y después se lo traslada al pueblo). El Estado así, no existe…

El pueblo no puede seguir pagando precios onerosos y el Gobierno salvadoreño no puede seguir endeudándose a través de subsidios, que aunque sean focalizados, no son regulados o supervisados por él, en esa política de “mercado libre”, que permite y ha permitido abusos y tiene al Mundo al borde de la quiebra.

Es cierto que la Empresa Privada y la inversión extranjera deben fomentarse, pero debe establecerse un marco de referencia, con reglas claras del juego y donde el Estado supervise y corrija las disfuncionalidades y frene los abusos.

Es cierto que nadie trabaja gratis y que la Empresa Privada necesita obtener ganancias; pero éstas tienen que ser razonables y reguladas cuando se trate de monopolios o carteles oligopólicos. Con mayor razón, cuando tenemos una crisis internacional de grandes proporciones que pronto nos impactará con inusitada fuerza. Si bien la calificación del país – según la calificadora de riesgos Fitch Ratings, se mantiene regular, en BBt, la perspectiva está en negativa, esto es, que se espera que baje aún más en el próximo futuro. El subsidio a la energía es un factor preponderante, ya que no tiene una fuente directa de financiamiento y no se ha calculado con exactitud matemática, cual es el % que llega realmente al bolsillo de los consumidores. Los subsidios disminuirían sensiblemente, con una mejor capacidad del Gobierno con las generadoras y distribuidoras de Energía y con una mejor revisión de las ganancias reales de los operadores por parte del Ministerio de Hacienda.

Esto es fácil; pero se necesita de buena voluntad.