Insuficiencias en Hospitales Públicos
Miércoles 7 de Febrero de 2007.-
En el Diario de Hoy del lunes 20 de noviembre del 2006 y en primera página leíamos lo siguiente: “Recorte en medicinas. Salud ha previsto una reducción de 10 millones de dólares para la compra de medicamentos para 2007 y la escasez toca el bolsillo de los pacientes”. Una nueva reducción; de un presupuesto ya exiguo e insuficiente, propio de un país del 5to mundo; y luego aclaraba: “$10 millones menos que lo gastado en 2006, un período marcado por escasez de todo tipo, desde guantes y jeringas en el Bloom y la actual falta de antibióticos en el Rosales. Si ahora hay marcadas deficiencias, significa que en el 2007 la crisis se agudizará aún más... Se alega escasez de presupuesto, pero no existe ninguna excusa ni válida ni lógica para castigarse el rubro básico para garantizar la salud: los medicamentos.
El Hospital Rosales suspendió en el 2006 los tratamientos oncológicos (contra el cáncer) especialmente leucemias agudas, por carecer de antibióticos para tratar las infecciones concomitantes con estos tratamientos, recibió para el 2007 no el doble de presupuesto para paliar la crisis; sino la mitad, para agudizarla... Esto no puede justificarse por un error humano, ni por falta de presupuesto, sino a una insensibilidad humana…
La Prensa Gráfica, el martes 21 de noviembre complementaba la noticia:
En octubre 2006 las carencias del Hospital de niños, Benjamín Bloom, para concluir 2006 fueron cifradas en $2 millones por la Dirección. De esa cantidad apenas obtuvieron la cuarta parte.
El Hospital Rosales ha reconocido la carencia de medio centenar de medicamentos del cuadro básico. Lo más preocupante es la carencia de antibióticos que impiden hacer tratamientos de quimioterapia a pacientes con leucemia aguda.
Fuera de ello, el Dr. Guillermo Maza, Ministro de Salud atribuyó a finales del 2006, a “otras autoridades fuera del Ministerio, la no construcción de un Hospital en Apopa y alrededores porque “el país no se puede endeudar más”. Por lo mismo, el nuevo Hospital de Maternidad no será construido.
Lo curioso es que no hay dinero para hospitales ni medicamentos para los más pobres de los pobres, pero si los hay para carreteras, autopistas, propaganda y publicidad; misiones y delegaciones internacionales; seguridad aparatosa, etc, etc.
Se dice que no hay dinero…
¡Que rápido se encuentra cuando se desea!
La falta de medicamentos e insumos médicos ha sido común en los hospitales de salud pública.
Si esto pasó en el 2006 ¿Qué está pasando en el 2007 con la disminución en el presupuesto y en la compra de medicamentos ya históricamente deficientes?
…Esto es inquietante y capaz de deprimir a cualquier ser humano.
El problema se complica porque la tradicional compra anual de medicamentos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social ni siquiera se ha publicado, mucho menos adjudicado y tan sólo se licitó una pequeña compra de emergencia. Por otro lado, el ISSS que sí realizó su licitación anual, aunque eliminando ítems, reduciendo requisitos de calidad, disminuyendo cantidades, reduciendo concentraciones etc., todavía, al 7 de febrero 2007, no ha adjudicado; lo que significa desabastecimiento, o compras directas (?) o a un milagro, de que nuestro pueblo se enferma menos y necesita menos medicamentos o necesidades insatisfechas… ¿Usted que cree estimado teleaudiente?
Es importante recalcar que la salud; es el don más preciado que Dios nos ha dado. Por eso se dice que hay que pedir a Dios el perdón para la otra vida y la salud para ésta. Nadie ha recibido nada más precioso que la salud. Es el beneficio que Dios ama por encima de cuanto se le pide. Sin salud, la vida no es vida. Es estado de tristeza y una imagen de muerte. Por otro lado, es un deber protegerla:
“La salud de los habitantes de la República constituye un bien público. El Estado y las personas están obligados a velar por su conservación y establecimiento. (Art. 65 de la Constitución Política)”.
No hay duda que el flagelo más grande de nuestro país, mucho mayor que la guerra y que la delincuencia y que se agudizará en los próximos años, es la mortalidad por causa de las enfermedades no solo de las incurables, sino de las incluso, fácilmente curables, con la atención oportuna. Naturalmente por medio del descuido en la salud, se obtiene más mortandad que en cualquier tipo de guerra incluso los más sofisticados y mucho mayor que la delincuencia, aunque se encuentre organizada.
La sensibilidad social, el verdadero sentido humano, es satisfacer las necesidades más sentidas de nuestros conciudadanos más pobres y más débiles, impulsándonos a cambiar el destino de nuestras clases pobres, hambrientas y enfermas. Luchar contra las enfermedades, es elevar al ser humano: hombre o mujer, joven o anciano, niño o niña y devolverle sus libertades fundamentales, es sacarlo de su drama diario e incorporarlo a la felicidad, llevándolo a la meta incomparable de la salud popular.
Ortega y Gasset afirmaba que el mañana es producto de hoy. La vida es paso; los funcionarios pasan; pero dejan caminos y hacen historia. Y ésta los juzgará....Nadie pide lujos ni prebendas ni hermosas autopistas ni suntuosos palacios ni gastos desmedidos. No exigimos desarrollo que no merecemos. Necesitamos pan y salud, seguridad y educación para nuestro pueblo. ¿Qué acaso es mucho pedir?...
En el Diario de Hoy del lunes 20 de noviembre del 2006 y en primera página leíamos lo siguiente: “Recorte en medicinas. Salud ha previsto una reducción de 10 millones de dólares para la compra de medicamentos para 2007 y la escasez toca el bolsillo de los pacientes”. Una nueva reducción; de un presupuesto ya exiguo e insuficiente, propio de un país del 5to mundo; y luego aclaraba: “$10 millones menos que lo gastado en 2006, un período marcado por escasez de todo tipo, desde guantes y jeringas en el Bloom y la actual falta de antibióticos en el Rosales. Si ahora hay marcadas deficiencias, significa que en el 2007 la crisis se agudizará aún más... Se alega escasez de presupuesto, pero no existe ninguna excusa ni válida ni lógica para castigarse el rubro básico para garantizar la salud: los medicamentos.
El Hospital Rosales suspendió en el 2006 los tratamientos oncológicos (contra el cáncer) especialmente leucemias agudas, por carecer de antibióticos para tratar las infecciones concomitantes con estos tratamientos, recibió para el 2007 no el doble de presupuesto para paliar la crisis; sino la mitad, para agudizarla... Esto no puede justificarse por un error humano, ni por falta de presupuesto, sino a una insensibilidad humana…
La Prensa Gráfica, el martes 21 de noviembre complementaba la noticia:
En octubre 2006 las carencias del Hospital de niños, Benjamín Bloom, para concluir 2006 fueron cifradas en $2 millones por la Dirección. De esa cantidad apenas obtuvieron la cuarta parte.
El Hospital Rosales ha reconocido la carencia de medio centenar de medicamentos del cuadro básico. Lo más preocupante es la carencia de antibióticos que impiden hacer tratamientos de quimioterapia a pacientes con leucemia aguda.
Fuera de ello, el Dr. Guillermo Maza, Ministro de Salud atribuyó a finales del 2006, a “otras autoridades fuera del Ministerio, la no construcción de un Hospital en Apopa y alrededores porque “el país no se puede endeudar más”. Por lo mismo, el nuevo Hospital de Maternidad no será construido.
Lo curioso es que no hay dinero para hospitales ni medicamentos para los más pobres de los pobres, pero si los hay para carreteras, autopistas, propaganda y publicidad; misiones y delegaciones internacionales; seguridad aparatosa, etc, etc.
Se dice que no hay dinero…
¡Que rápido se encuentra cuando se desea!
La falta de medicamentos e insumos médicos ha sido común en los hospitales de salud pública.
Si esto pasó en el 2006 ¿Qué está pasando en el 2007 con la disminución en el presupuesto y en la compra de medicamentos ya históricamente deficientes?
…Esto es inquietante y capaz de deprimir a cualquier ser humano.
El problema se complica porque la tradicional compra anual de medicamentos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social ni siquiera se ha publicado, mucho menos adjudicado y tan sólo se licitó una pequeña compra de emergencia. Por otro lado, el ISSS que sí realizó su licitación anual, aunque eliminando ítems, reduciendo requisitos de calidad, disminuyendo cantidades, reduciendo concentraciones etc., todavía, al 7 de febrero 2007, no ha adjudicado; lo que significa desabastecimiento, o compras directas (?) o a un milagro, de que nuestro pueblo se enferma menos y necesita menos medicamentos o necesidades insatisfechas… ¿Usted que cree estimado teleaudiente?
Es importante recalcar que la salud; es el don más preciado que Dios nos ha dado. Por eso se dice que hay que pedir a Dios el perdón para la otra vida y la salud para ésta. Nadie ha recibido nada más precioso que la salud. Es el beneficio que Dios ama por encima de cuanto se le pide. Sin salud, la vida no es vida. Es estado de tristeza y una imagen de muerte. Por otro lado, es un deber protegerla:
“La salud de los habitantes de la República constituye un bien público. El Estado y las personas están obligados a velar por su conservación y establecimiento. (Art. 65 de la Constitución Política)”.
No hay duda que el flagelo más grande de nuestro país, mucho mayor que la guerra y que la delincuencia y que se agudizará en los próximos años, es la mortalidad por causa de las enfermedades no solo de las incurables, sino de las incluso, fácilmente curables, con la atención oportuna. Naturalmente por medio del descuido en la salud, se obtiene más mortandad que en cualquier tipo de guerra incluso los más sofisticados y mucho mayor que la delincuencia, aunque se encuentre organizada.
La sensibilidad social, el verdadero sentido humano, es satisfacer las necesidades más sentidas de nuestros conciudadanos más pobres y más débiles, impulsándonos a cambiar el destino de nuestras clases pobres, hambrientas y enfermas. Luchar contra las enfermedades, es elevar al ser humano: hombre o mujer, joven o anciano, niño o niña y devolverle sus libertades fundamentales, es sacarlo de su drama diario e incorporarlo a la felicidad, llevándolo a la meta incomparable de la salud popular.
Ortega y Gasset afirmaba que el mañana es producto de hoy. La vida es paso; los funcionarios pasan; pero dejan caminos y hacen historia. Y ésta los juzgará....Nadie pide lujos ni prebendas ni hermosas autopistas ni suntuosos palacios ni gastos desmedidos. No exigimos desarrollo que no merecemos. Necesitamos pan y salud, seguridad y educación para nuestro pueblo. ¿Qué acaso es mucho pedir?...